Mitsurugi y Nagihara, las nuevas empleadas de la empresa, trabajan con diligencia y son apreciadas por sus cualidades profesionales. Mitsurugi es la responsable, mientras que Nagihara es admirada por su comportamiento refinado. Sin embargo, en secreto, ambas mujeres trabajan en otro lugar, mostrando una personalidad completamente diferente a la que muestran en el trabajo. En este lugar se desatarán sus fetiches masoquistas al alcanzar el orgasmo, lo que despierta la curiosidad sobre su verdadera personalidad.